Los hechos vienen ocurriendo desde el mes de julio del año pasado, en el que un empleado de una tienda de tecnología, habría estado sustrayendo móviles aprovechando que el mismo trabaja en la tienda.

El pasado martes por la tarde, el vigilante de seguridad de la tienda, procedió a retener a un empleado porque llevaba móviles que no los había abonado, una vez traspasado la línea de cajas, y a partir de aquí, se procedió a avisar a la Policía Nacional.

El grupo de investigación de la comisaría de Distrito Oeste de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación y pudo averiguar que la forma que tenía el presunto autor en sustraer los terminales móviles era que se los metía en el bolsillo y salía de la tienda a tomar un café, para acto seguido dirigirse a su coche y depositar allí el teléfono.

Una vez sustraído le daba salida en el mercado negro

Se ha contabilizado hasta el momento  40.000 euros en terminales móviles de gama media alta, pudiendo recuperar hasta 12.000 euros en dispositivos electrónicos.

Por todo ello se procedió a detener al presunto autor por múltiples hurtos de teléfonos móviles.