La coordinación entre cuerpos, la formación en primeros auxilios y la compenetración entre los policías y los servicios sanitarios han salvado una vida.

Pasadas las 02:25 horas de la madrugada del pasado domingo, una pareja de ciudadanos paseaba por la calle Monges de Porto Cristo (Manacor) cuando observaron a un hombre de edad avanzada tirado en la acera, lo cual parecía extraño, por lo que se acercaron y comprobaron que no respiraba, procediendo a llamar inmediatamente al 112.

La colaboración ciudadana y la compenetración de ambas policías fueron fundamentales para salvar la vida a ésta persona

En escasos minutos se personaron en el lugar sendas patrullas de Policía Nacional y de la Policía Local en Manacor, los cuales valoraron rápidamente la situación del anciano e iniciaron las técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP), realizando entre los componentes de ambas patrullas el masaje cardíaco de forma totalmente coordinada, dándose los oportunos relevos. Posteriormente  llegaron más patrullas que igualmente se unieron a la reanimación hasta que llegaron los servicios sanitarios, los cuales, una vez en el lugar, solicitaron a los agentes que siguieran realizando la RCP hasta que tuvieran dispuesto todo su equipo y le administrasen los medicamentos oportunos, lo cual así se hizo ya bajo la supervisión médica.

Gracias a todo ese cúmulo de circunstancias, iniciado por unos ciudadanos que no dudaron en ayudar a un vecino con tan sólo comprobar si estaba bien y llamar a emergencias, minutos después el anciano comenzó a respirar de forma autónoma y, tras su estabilización por parte de los sanitarios, pudo ser trasladado por los mismos de urgencia hasta el hospital de Son Espases.

En este caso los Policías actuantes, además de la propia satisfacción por haber conseguido ayudar a salvar la vida del anciano, también se llevaron otro importante premio a través del reconocimiento por parte de los sanitarios de la ambulancia por su trabajo bien hecho durante el auxilio, lo cual les facilitó enormemente su labor y que, sin ningún género de dudas, la labor coordinada entre diferentes profesionales salvó la vida de esa persona.