Guardias civiles destacados en Cabrera, alertados por el fuerte viento y el oleaje que causaba la tormenta comprobaron ayudándose de prismáticos desde tierra, que las embarcaciones fondeadas que se encontraban en la bahía de Cabrera, estuvieran en condiciones de seguridad.

En un momento dado vieron como 4 personas a bordo de una embarcación auxiliar de pequeñas dimensiones intentaban llegar a puerto, debido a las condiciones adversas por el temporal, el oleaje empujaba la pequeña neumática hacia las rocas. Los guardias civiles observaron que era imposible que llegara a puerto o zona segura, decidieron llegar hasta ellos con la embarcación oficial, una zona complicada de rocas donde iba a terminar golpeando el ‘dingui’. Una vez lo consiguieron, los remolcaron hasta la costa y los trasladaron hasta el sanitario que hay en el Parque Nacional para ser atendidos por hipotermia.

Cuando estuvieron recuperados y mejoraron las condiciones meteorológicas, los guardias civiles los trasladaron en la embarcación del Cuerpo hasta el velero que tenían fondeado en la bahía.