Agentes de la Policía Nacional detuvieron la semana pasada a un varón de origen marroquí y de 31 años de edad, como presunto autor de un delito de allanamiento y daños.

Los hechos ocurrieron la semana pasada, en la barriada de Can Pastilla, momento en el que entró una llamada en la Sala del 091 comunicando que estaban observando a un varón en el interior de un domicilio.

Una vez en el lugar, los agentes se entrevistaron con el vigilante de seguridad, el cual les manifestó que estaban viendo en ese preciso momento a un varón en el interior de la vivienda.

Los agentes realizaron varias batidas por el perímetro de la casa, sin observar a ninguna persona ni nada forzado, por lo que dieron indicaciones al supuesto varón para que abriera la puerta, accediendo el hombre a ello, indicándole que saliera del domicilio, intentando cerrar la misma, momento en el que uno de los agentes se lo impidió y procedieron a su inmovilización.

Los agentes realizaron una batida por el interior de la vivienda, pudiendo observar en el salón de la casa varios elementos del sistema de seguridad dañados, así como una mochila negra, propiedad del detenido, en la cual portaba un martillo multiusos y un destornillador de grandes dimensiones, con los que habría podido haber forzado la ventana que encontraron con signos de violencia tras comprobar tal extremo.

Es por tales motivos, por lo que los agentes procedieron a la detención del varón, como presunto autor de un delito de allanamiento y daños.