La Guardia Civil ha procedido a la detención de un joven de 21 años, como presunto autor de un delito de amenazas y daños.

El pasado día 14 de agosto, el detenido realizó unos disparos con un arma de aire comprimido sobre la fachada de un centro de menores de la localidad de Cala Rajada, provocando la rotura de algunos de los cristales de las ventanas.

Tras la investigación abierta por la Guardia Civil, se comprobó que todo ello estuvo originado por una enemistad surgida entre un grupo de jóvenes allí alojados y un clan familiar al que le habían sustraído un patinete eléctrico.

Además, por el mismo motivo y en días anteriores a los daños provocados en los cristales del edificio, tuvo lugar un enfrentamiento entre los dos grupos en el que se agredieron mutuamente.