Como parte de una inspección rutinaria en una empresa de paquetería con sede en la isla de Mallorca, agentes de ambos cuerpos procedieron a la inspección de un envío sospechoso. El can detector de drogas marcó de manera inequívoca un paquete que contenía 10 tabletas envasadas al vacío, con un total de 969 gramos de una sustancia orgánica marrón. Tras la incautación se realizó un narco test, confirmando la presencia de hachís.

Derivado de este hallazgo se inició una investigación conjunta, lo que permitió la identificación y posterior detención de una persona en Palma, como presunto autor de un delito contra la salud pública, que fue puesto a disposición judicial.

Continuando con la labor inspectora, se realizó un nuevo un operativo conjunto en otra empresa de paquetería y reparto. Durante el dispositivo policial se identificó un paquete con indicios de contener sustancias ilícitas, debido a sus características de embalaje y datos consignados en la etiqueta, por lo que fue sometido a un escáner de Rayos X, cuyo análisis confirmó la presencia de un material sospechoso en su interior.

Tras su apertura se hallaron un total de 2,642 kilogramos de hachís, divididos en 37 tabletas envasadas al vacío, junto con otras seis porciones adicionales de la misma sustancia. Los resultados fueron ratificados mediante pruebas de narco test.

Como resultado de esta segunda investigación, dos personas fueron detenidas en el ámbito del partido judicial de Inca (Islas Baleares) y posteriormente puestas a disposición judicial.

Las investigaciones continúan abiertas, sin que se descarten nuevas detenciones en los próximos días.